Es el depósito de los espermatozoides, previamente seleccionados, dentro del útero, provenientes de la muestra de semen (de un donador o conocido).
Procedimiento:
Este procedimiento esta indicado en parejas cuya causa de infertilidad es la ausencia de espermatozoides en el eyaculado (azoospermia), que tienen espermatozoides pero no se mueven o están muertos, o que no puedan resolver su problema mediante el ICSI (inyectando un espermatozoide en cada óvulo) o recuperación de espermatozoides por biopsia de los testículos o epididimo. También indicada en enfermedades genéticas, que pueden ser transmitidas a los hijos, por parte del hombre.
Existen dos tipos de donantes de semen:
El donante anónimo (de un banco de semen): Los donantes de semen son cuidadosamente seleccionados con evaluaciones médicas y psicológicas antes de obtener la muestra. Las muestras de semen son criopreservadas (congeladas) y almacenadas por lo menos durante seis meses (cuarentena). En este tiempo los donantes son re-evaluados periódicamente para descartar enfermedades transmisibles tales como hepatitis y SIDA, entre otras.
Después del periodo de cuarentena las muestras pueden ser usadas, ya que se ha confirmado que se encuentran libres de las enfermedades examinadas. Una vez liberada la muestra, podemos seleccionar al donador de acuerdo a las características similares al padre: tipo sanguíneo, estatura, peso, tono de piel, color de ojos y cabello, entre otras.
El donante conocido: En este caso el donante y la pareja o paciente receptora se conocen, y son ellos quien establecen como será su relación posterior. Para el donante se dan instrucciones para realizar el mismo tipo de evaluaciones que realizamos en el donador anónimo. Es altamente recomendable que se asesoren con soporte emocional